En los partidos de padel, especialmente aquellos en los que el nivel de las parejas es más igualado el resultado final es la unión de distintos factores, pequeños detalles que pueden equilibrar la balanza hacia uno u otro lado como la condición física, mental… o los errores no forzados que cometemos muchas veces. Hoy en la tienda de padel online Time2Padel te contamos cómo evitarlos.
Para ganar al padel la clave es conseguir fallar menos que nuestros rivales, los errores durante el juego pueden ser o bien provocados por nuestros adversarios o por fallos nuestros. Huelga decir que si podemos evitar alguno de estos fallos tendremos más opciones que nuestro rival y los provocados no dependen en su totalidad de nuestro esfuerzo por lo que debemos de centrarnos en los errores no forzados, aquellos que cometemos por nuestra cuenta y que pueden determinar el rumbo del partido. Para evitarlos o al menos reducirlos debemos de tener las siguientes cuestiones en cuenta:
- No arriesgar: La clave para no fallar es no jugar con golpes o movimientos arriesgados utilizando palas de control, que nos transmitan seguridad como la Varlion LW H Difusor Carrera. En los puntos largos mantén la pelota en juego y espera que sea tu rival el que quiera resolver el partido arriesgándose. Los golpes seguros no son tan espectaculares y pueden eternizar los puntos pero es una manera de ganar confianza en el juego y de conseguir que sea el rival el que quiera definir cuanto antes. Especialmente en partidos igualados la paciencia va a ser la mejor aliada para llevarnos el partido.
- No lamentar: A medida que nos convertimos en mejores jugadores y nuestro nival va aumentando también es frecuente que lo haga nuestro nivel de autoexigencia. Esto puede ser positivo porque nos hará trabajar y esforzarnos más para conseguir buenos resultados pero puede volverse en nuestra contra en el momento que fallamos. La frustración e impotencia que surge a la hora de cometer fallos no forzados debemos de trabajarla para convertirla en capacidad de superación para darle la vuelta a la situación. Si cometemos un fallo no forzado lo mejor es dejar de pensar en él una vez haya ocurrido y centrarnos en sacar adelante los siguientes. Si nos quedamos en ese fallo es muy probable que no consigamos concentrarnos en el resto del partido.
- No perder la concentración: El juego mental es una de las partes más importantes en el padel y a veces crucial a la hora de ganar un partido. Mantener la cabeza en todo momento en el juego requiere de un buen entrenamiento pero esto nos va a permitir ser más fuertes que nuestros rivales, recuperándonos mejor de los errores y mantener la atención en el juego, especialmente en aquellos movimientos que suelen ser más fáciles para evitar que un exceso de confianza nos puede llevar a equivocarnos.
- No repetir: Los errores son inevitables, especialmente en los primeros compases de juego pero es conveniente que analices los errores que cometes y en el caso de aquellos que no sean forzados tenerlos en cuenta para evitarlos en el siguiente partido. La experiencia que nos va a dar el juego es el mejor remedio para que estos fallos sean cada vez menos convirtiéndonos así en jugadores más completos. Comprueba en qué golpes fallas, si tu posición es correcta, si se debe a un exceso de confianza… y en función de eso corrígelo para la próxima ocasión que pises la pista.
Pero sobre todo… juega, observa, practica, aprende. Los errores no forzados son en muchos casos fruto de la poca experiencia ante determinadas situaciones y en consecuencia aquellos jugadores de iniciación que estén empezando a jugar con palas de iniciación como la Akkeron Nexus fallarán más que aquellos que tengan mayor nivel y apuesten por palas de gama alta como la Vibora Black Mamba, por eso el mejor remedio es jugar una y otra vez, entrenar y observar jugadores profesionales o nuestras propias jugadas.