Cabe destacar de este partido los golpes de Cristian Gutiérrez, por el contrario su compañero Matías Díaz puso las ganas y la garra. Combinación perfecta que hizo sudar a los príncipes, y conseguir el triunfo.
Un partido demasiado cambiante, donde se esperaba de nuevo el triunfo de los Principes, con un comienzo muy igualado, si había un break, al siguiente llegaba el contrabreak, si unos ganaban su juego en blanco, al siguiente se lo devolvían. Y así llegaron a el tie break, donde Juani y Pablo pudieron sentenciar 9-7.
Los príncipes salieron a darlo todo en el siguiente set, consiguiendo romper el saque de Cristian en el cuarto juego y llegaron a tener una ventaja de 5-2 en el marcador, ya tenían casi la final en el bolsillo, el público expectante, pero las Meigas cambiaban el juego a su antojo sorprendiéndonos por momentos.
Rompieron el saque de Lima en el noveno juego y volvieron a llevarla definición en la “muerte súbita”, donde esta vez no fallaron. Un set para cada lado y los minutos que avanzaban lentamente.
Lo del tercer set fue un partido totalmente diferente… Un break, dos break y hasta tres consiguieron Juani y Pablo. Un 6/1 que aumentaba las esperanzas de alcanzar el “doblete”.
Y el comienzo del cuarto set aumentaba aún más esa ilusión. Por dos veces tuvieron un break de ventaja al comienzo y no lograron consolidar. Llegaron a tener bola para el 4-1 y a partir de ese momento cambió por completo el trámite del encuentro.